¿A quén no sabías!

¿A qué no sabías?

Es sabido por muchos, desconocido por otros, pero siempre existe el fantasma de “la música no nos sirve para nada” en cambio, la música está con nosotros en todos lados, en el cine, en el auto, en la televisión, en la radio, en nuestras actividades diarias, y porque se ha estereotipado tanto el clásico de músico te morirás de hambre pero no nos damos cuenta que siempre la música está a nuestro alrededor. Muchos artistas parecen deslumbrarse ante la novedad ofrecida por cierto tipo de instrumentos, programas o artefactos cuando el problema es “tener algo que decir” en términos de una estética, de ideas o simplemente de una experiencia sensorial.

Algunas cosas que la música invita a desarrollar y que no sabías son:

  1. Mejora el vocabulario

Durante el entrenamiento musical para tocar un instrumento se establecen conexiones neuronales que mejoran también otros aspectos de la comunicación humana. Los niños con formación musical tienen un mejor vocabulario y capacidad de lectura. Nature Reviews Neuroscience por Nina Kraus.

  1. ¿Música de fondo?

Tanto si reproducimos una canción de heavy metal como si optamos por un disco de música clásica, escuchar música mientras desarrollamos una tarea cognitiva reduce el rendimiento, lo mejor en estos casos, es el silencio.

  1. Ritmo para hacer deporte

Científicos de la Universidad de Brunel demostraron en 2008 que escuchar cierto tipo de música, fundamentalmente de los géneros rock y pop, podemos aumentar nuestra resistencia al ejercicio físico intenso hasta un 15%. El estudio fue publicado en la revista Journal of Sport & Exercise Psychology.

  1. La música, por la izquierda

Según un estudio realizado y publicado en Science, el oído derecho recoge mejor los sonidos del habla, mientras que el izquierdo, responde mejor a la música. “Incluso al nacer, el oído está estructurado para distinguir entre los diferentes tipos de sonidos y enviarlo al lugar correcto en el cerebro”. Barbara Cone-Wesson.

  1. Con los ojos cerrados

Estudiando los cerebros de 15 sujetos con ayuda de resonancia magnética funcional, Yulia Lerner, de la Universidad de Tel Aviv, demostró que al cerrar los ojos aumenta el efecto emocional que nos produce la música. Lerner utilizó música de miedo y suspenso como la empleada por Alfred Hitchcock en sus películas. Y comprobó así que la actividad de la amígdala, una zona del cerebro es vinculada a la sensación de miedo, así aumentaba mucho más con los ojos cerrados que si se mantenían abiertos.

En conclusión la música es el acompañante perfecto para cualquier ocasión, hagas lo que hagas, vayas a donde vayas, la música estará presente, y que mejor que saber que estamos escuchando, entender el lenguaje musical puede ayudar de manera sobresaliente en mejorar nuestra vida diaria.

// Max Moses