Este año, Danza de Cámara vivió una transformación importante, el certamen que en años anteriores se había visto
disminuido en tamaño, regresó con una forma completamente renovada.
Por primera vez en su historia, el certamen ofreció fabulosos premios a los participantes incluyendo un viaje a Nueva York con clases en el Broadway Dance Center, un día de SPA en un prestigioso hotel de la Ciudad de México, boletos para el Lago de los Cisnes y clases de entrenamiento en La Cantera-Estudio de Danza.
Bajo el tema ESH: el fuego en el judaísmo, 19 propuestas diversas se presentaron en un foro especialmente construido para el evento en el Asoleadero del CDI. La noche dio inicio con una apertura a cargo de Denise Steiner y Moises Himmelfarb, directores del evento, en donde efectos especiales con lanzallamas dieron arranque a una noche espectacular. También contamos con participaciones especiales de Anajnu Veatem y Tzuzá de Israel.
Los grupos participantes pasaron por un proceso de asesoría, en donde pudieron compartir sus opiniones y procesos con otros bailarines y coreógrafos.
El mayor reto que enfrenta este certamen es poder superar el éxito de este año con una mejor propuesta en su próxima edición.