El Primer Ministro, Benjamin Netanyahu, calificó a las Naciones Unidas de ‘casa de
las mentiras’, al rechazar la inminente votación en la Asamblea General, que pretende criticar el reconocimiento por parte de Estados Unidos de Jerusalem como la capital de Israel.
Netanyahu afirmó que otros países seguirán las huellas de Washington y trasladarán su embajada a la ciudad santa. “Jerusalem es la capital de Israel, ya sea que la ONU lo reconozca o no”, subrayó Netanyahu en la inauguración de un hospital universitario en el Centro Médico Assuta, en Ashdod.
“Le tomó setenta años a Estados Unidos reconocer eso oficialmente, y le tomará más años a la ONU reconocerlo también. El trato que le dan a Israel numerosos países en todos los continentes del mundo está cambiando, y finalmente se extenderá a los pasillos de la ONU”, afirmó.
El Primer Ministro aseveró que Israel “rechaza ese voto sin más, incluso antes de que se apruebe”. “Jerusalem es nuestra capital. Seguiremos construyendo en ella, y las embajadas de países extranjeros, principalmente Estados Unidos, se trasladarán a Jerusalem. Escriban lo que digo, porque sucederá”, agregó Netanyahu. Israel está presionando intensamente a numerosos países de todo el mundo para que se opongan a la resolución de la ONU. Un funcionario del Ministerio de Exteriores confirmó que el Gobierno estaba haciendo una campaña muy amplia para minimizar el impacto de la resolución.
Israel está tratando de persuadir a sus aliados para que se abstengan o incluso voten en contra, apuntó un funcionario al diario Yediot Aharonot. También dijo que se ha pedido a organizaciones judías de ciertos países que presionen a sus gobiernos en favor de Israel. No obstante, indicó que la campaña será exitosa hasta cierto punto.
Fuente: www.aurora-israel.co.il