Aura Air se estableció hace tres años y medio. Desde el principio,

la misión de la compañía fue mejorar la calidad del aire interior a nivel mundial. Su padre dirige una empresa de sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC) y los hermanos Shnaiderman eran muy conscientes de la necesidad de aire interior no contaminado.

“La gente entiende lo que come, bebe, dónde se ejercita y demás, pero no presta atención a lo que respira. Empezamos nuestro negocio porque pensamos que la gente debería prestar más atención al aire”, dice Shnaiderman.

Las aplicaciones de monitoreo de la calidad del aire exterior, como BreezoMeter, de Israel, se han adoptado rápidamente en las zonas urbanas de todo el mundo.

La tecnología Aura Air monitorea la presencia de partículas y gases en el aire en interiores y purifica y desinfecta cualquier virus, moho, bacteria y hongo que se encuentre. La empresa utiliza cuatro filtros patentados para cambiar el aire de una habitación cada dos horas y media.

A través de la aplicación, se pueden ver los compuestos orgánicos volátiles (COV) que se emiten como gases, los niveles de humedad (si la humedad relativa interior es superior al 60 por ciento, se empieza a formar moho) y los niveles de óxido y dióxido de carbono en comparación con las condiciones exteriores locales.

El usuario puede añadir categorías. Si es asmático o alérgico al polvo, los sensores crearán un ambiente de calidad de aire interior para satisfacer estas necesidades. Además, la aplicación puede destacar los escenarios de alto riesgo relevantes y notificar al usuario lo que necesita ser desinfectado o purificado.

Hay un prefiltro que atrapa grandes partículas de polvo, polen, insectos, pelo de animales y otras partículas grandes. El prefiltro también absorbe COV y malos olores y filtra virus y bacterias. El Filtro de Rayos entonces neutraliza las bacterias, virus y parásitos. Luego hay un componente LED UVC y un esterilizador que generan iones positivos y negativos para purificar y refrescar el aire interior y continuar eliminando los contaminantes dañinos.

Esta capacidad de mantener limpio el aire en el interior puede ser clave en la lucha contra la pandemia.

Un estudio de Japón publicado en abril muestra que el riesgo de infección en interiores es casi 19 veces mayor que en los ambientes al aire libre. Otros estudios científicos están tratando de responder a la pregunta de cómo puede minimizarse la transmisión por aire de Covid-19 en interiores, y las agencias medioambientales como la Alianza Europea de Salud Pública (EPHA) y la Agencia de Protección Medioambiental de los Estados Unidos (EPA) están emitiendo repetidas advertencias sobre los peligros del aire sucio.

Por supuesto, Aura Air no es la única plataforma de calidad del aire para uso en interiores. Sin embargo, lo que la destaca sobre el resto son sus ensayos clínicos que están siendo llevados adelante en el Centro Médico Sheba de Tel Hashomer tras haber firmado un contrato con el hospital.

En marzo de 2020, Aura Air tenía clientes en tres países. En diciembre, la compañía estaba operando en más de cincuenta naciones. Su tecnología se instaló en los salones de recepción del Palacio de la Zarzuela del Rey de España, la residencia y oficinas de trabajo del monarca reinante, Felipe VI, en las afueras de Madrid.

El mes pasado, Aura Air volvió a los titulares mundiales con la noticia de un acuerdo de treinta millones de dólares con la Corporación Japonesa JTEC, una empresa especializada en seguridad y protección. El distribuidor japonés anunció que usaría la solución de Aura Air para ayudar a mantener abiertos los establecimientos de karaoke de Japón, una de las principales actividades sociales de los adultos japoneses.

Las posibles ramificaciones para poder mantener a Covid-19 fuera de una habitación son enormes: la industria del entretenimiento podría volver a llenar los teatros, los estadios deportivos podrían albergar a audiencias en vivo, las salas de espera de los hospitales no serán un peligro para la salud.

“Autobuses, trenes, institutos educativos, hospitales, clínicas, hoteles, lo que sea”, dice Shnaiderman sobre los lugares actuales que utilizan sus productos. “La industria es interminable. Incluso con la vacuna, la gente se lo piensa dos veces antes de ir a cualquier sitio en el interior”.

“El nuevo coronavirus es importante, y es genial que podamos eliminarlo del aire en una habitación, pero lo más importante es entender la presencia de todas las partículas y gases en el aire, que pueden transportar 600 tipos de otro coronavirus u otra cosa. No sabemos cuántas cosas tenemos en el flujo de aire, virus, problemas de enfermedades infecciosas. Así que la conciencia es crítica”, dice Shnaiderman, señalando que se esfuerza por disminuir la prominencia del nuevo coronavirus cuando se trata de entender mejor la calidad del aire en su interior.

“El mercado de la calidad del aire va a ser un mercado enorme. La gente es consciente. Van a comprar dispositivos que les ayuden a visualizar lo que hay en el aire que respiran, y cómo tratar el aire para asegurarse de que están respirando mejor. Respirar no debería requerir un segundo pensamiento”, concluye Shnaiderman.

Fuente: agenciaajn

 

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